Pablo Rodríguez Luceno
MisioneroNací en Barcelona (España), el 23 de junio de 1981. Soy el mayor de tres hermanos (Esteban e Irene). Crecí en un hogar cristiano (¡a Dios se la gloria!), donde desde bien pequeño me enseñaron las Escrituras. Mi padre, Eladio Rodríguez (quien ya está con el Señor) fue pastor, maestro y predicador de una iglesia de Asambleas de Hermanos, y mi madre, Francisca Luceno, profesora de Escuela Dominical. Dice mi madre que a la edad de cuatro años, me acerqué a la puerta de la cocina mientras ella cocinaba y le dije: "Mama, he recibido a Jesús".
Haciendo un gran salto en la historia... a los 25 años, tuve un verdadero encuentro con Dios. Ese mismo día, de rodillas y llorando a los pies de mi cama, tuve el pleno convencimiento por parte de Dios de que Él me estaba llamando a servirle con toda mi vida.
Aunque estudié Educación Infantil, me dediqué al sector de las ventas hasta los 27 años. Luego me formé teológicamente obteniendo un "Bachiller en Ciencias Bíblicas y Teológicas" (2010), así como también me gradué del "Profesorado en Biblia y Teología" en SETECA (2011-2013).
Conocí a Dulce en el 2008, cuando visitó la iglesia a la que yo asistía, para compartir el testimonio sobre su secuestro. Junto a ella estoy aprendiendo y viviendo el verdadero amor en el matrimonio. Fruto de ese amor nació nuestra hija Aitana en marzo del 2019.
Dulce Ruth Solórzano Baños
MisioneraNací en la bella Ciudad de Guatemala, el 3 de octubre de 1981. Soy la menor de cinco hermanos (Boris, Olga -en la presencia del Señor-, Sergio e Iván). Crecí en un hogar cristiano, educada desde bien pequeña en la Palabra de Dios y preparada para la obra misionera. Mi papá, José Francisco Solórzano, fue pastor de la "Iglesia Tabernáculo Cristiano" por 37 años, junto a mi mamá, Ruth Baños, y llevan sirviendo al Señor más de 45 años.
A los 15 años fui salva, solamente por la Gracia y misericordia de Dios. Tuve una buena adolescencia. Pude estudiar y graduarme de algunas cosas, como "Locutora de Radio" y del "Profesorado en Biblia" (SETECA, 2004). Cuando estaba estudiando "Ciencias de la Comunicación"(Grado en Periodismo) a los 23 años, sufrí un secuestro que se prolongó por un período de 10 días. Esa experiencia cambió mi vida para siempre. Al ser liberada por el Comando Antisecuestros de la Policía Nacional Civil de Guatemala, lo primero que dije fue: "esto solo lo pudo haber hecho Dios, solo Él pudo sacarme de aquí".
Tres años después conocí a Pablo, el 30 de mayo de 2008, y meses más tarde empezamos nuestra relación. Dios nos unió para servirle conforme a su llamado y propósito. Por ese motivo, seguí estudiando "Licenciatura en Teología -Énfasis en Educación Cristiana-" (SETECA) y preparándome para servir mejor. Estoy escribiendo un libro en el que os contaré con detalle lo que sentí y viví durante el secuestro.